La publicidad en el punto de venta puede ser transmitida a través de diferentes soportes publicitarios entre los que destacan los posters, las pantallas de publicidad, las revistas y los folletos publicitarios, o incluso los propios empleados o personas encargadas de realizar la promoción concreta.
Para mejorar los resultados obtenidos por medio de publicidad emitida a través de los soportes mencionados, se aconseja tener en cuenta las siguientes claves:
- Transmitir mensajes interesantes, cortos, concisos y humanos. El mensaje debe tener un formato natural, por lo que las marcas deben olvidarse de los mensajes meramente corporativos y fríos.
- Comunicar con el consumidor, dejándole ser la estrella. La marca es quien a menudo comienza la comunicación. Sin embargo, muchas veces se cae en el error de querer decirlo todo en muy poco tiempo. Esto debe ser evitado. Es importante que, al principio, sea el consumidor quien pregunte y comparta su experiencia y sus necesidades. Tras ello, llegará el turno de la marca en el que el mensaje publicitario podrá ser lanzado. Recuerda que, al igual que en la comunicación entre personas, todos quieren tener un poco de protagonismo y la comunicación no podrá ser reducida a un monólogo.
- La emotividad es un buen aliado de las marcas. Sin embargo, a veces hay ocasiones en las que no se aconseja recurrir a mensajes emotivos. Es importante tener en cuenta la seriedad de algunos asuntos y adaptar el formato del mensaje publicitario a la situación.
- El mensaje debe ser creativo e innovador, en caso contrario se corre el riesgo de caer en la monotonía y ser percibido como “uno más”. Existe demasiada oferta en el mercado y los empresarios deben encontrar el modo de distinguir sus productos.
- Hay que entender el poder que tienen las quejas, sugerencias y consejos. Además, las marcas deben aprender a aprovechar el potencial que se esconde detrás de éstas. Tan solo de esta manera se podrá mejorar la experiencia de consumo y perfeccionar al producto ofrecido. Recuerda que es el consumidor quién debe estar encantado con la marca, para convertirse en un embajador de la marca.