El concepto de tienda tal y como la conocíamos hasta hace poco está cambiando. Y no sólo porque el comercio electrónico permite adquirir ropa, alimentos, viajes, ropa o cualquier otro objeto que deseemos sin tener que movernos de casa, sino también porque las nuevas tecnologías han empezado a formar parte de las tiendas físicas de muchas marcas. Es cierto que todavía no tenemos tiendas como las que podemos ver en las películas futurísticas, pero ya se han aplicado ciertas tecnologías que hacen que la experiencia de los consumidores sea mucho más positiva. Es el caso, por ejemplo, de aquellos comercios que permiten realizar la compra por Internet e ir a recoger el producto a la tienda física. De esta forma, cuando el cliente se desplaza pierde el menor tiempo posible, pues sabe que el producto que quería estará en la tienda.
Por otro lado, los smartphones se han instalado por completo en nuestras vidas y nos acompañan allá a donde vayamos. Debido a ello, las empresas están empezando a aprovechar las posibilidades que ofrecen este tipo de dispositivos para mejorar la experiencia de compra, ampliar la información sobre los productos, interactuar con la marca, dar a conocer promociones o escanear códigos QR.
Pero además, son muchas las empresas que han empezado a estudiar cómo explotar el potencial de las nuevas tecnologías en el punto de venta. Algunas de las cuestiones en las que se está trabajando son ayudar al cliente a encontrar lo que busca sin tener que recorrer las estanterías o pagar sin hacer cola. Pero las posibilidades son muchas y muy variadas. A continuación te mostrarmos algunos ejemplos de negocios que ya se están adaptando y que han convertido las nuevas tecnologías en ese valor añadido que los clientes demandan y que hace que prefieran ir a la tienda que realizar el pedido por Internet.
Los «espejos mágicos de Diesel»
Diesel fue una de las primeras firmas en apostar por las tecnologías interactivas en sus puntos de venta. En 2010 se instalaron en sus tiendas de Madrid y Barcelona «espejos mágicos» que permiten a los clientes compartir su look en las redes sociales para conocer la opinión de sus amigos y de los fans de la marca.
Las tablets de Bloomingdale’s
La cadena de tiendas Bloomingdale’s ha instalado tablets en las paredes de sus probadores para que el cliente pueda localizar las prendas en la tienda o escanear el artículo que ha cogido para comprobar si hay tallas y colores disponibles, y saber las opiniones de otros clientes.
El trato personalizado de Orange
Muchos consumidores echan de menos el trato personalizado que se daba en las tiendas hace unos años. Por esta razón, Orange ha implementado un sistema para que los clientes sean saludados por su nombre y que intuyen que hemos traspasado el umbral de la puerta.