¿Es la publicidad en el lugar de venta una enemiga de las tiendas online? ¿Se trata de un tipo de amenaza, ya que pretende conseguir un incremento de las ventas al momento?
Habrá quienes digan que sí, sin embargo, en mi opinión la publicidad en el lugar de venta puede conseguir un incremento también en las ventas online.
Y cuando digo en las ventas online, no me refiero solo a las ventas que la misma tienda puede conseguir, sino los beneficios que obtienen algunos comercios electrónicos sin invertir en publicidad.
Imaginemos que estamos buscando un televisor y acudimos a una tienda comercial especializada en productos tecnológicos. Ahí consumimos mensajes publicitarios que nos llevan a elegir entre dos marcas de televisores que se encuentran en promoción.
El siguiente paso, para muchos individuos, sería una búsqueda rápida en internet. ¿El propósito? Comprobar si alguna tienda online ofrece el mismo modelo de televisor a precio inferior.
Dependiendo de la diferencia económica y de las garantías que la tienda online en cuestión ofrezca, se podría dar el caso en el que el individuo vuelve a casa y compra online su producto. ¿Qué ocurre entonces? Que el anunciante que ha invertido recursos económicos en la publicidad (la superficie comercial) no es quien se beneficiará de un incremento en las ventas, sino un competidor online.
Y aunque es cierto que la publicidad en el lugar de venta pretende conseguir un incremento de las ventas en el momento, cabe destacar que el resultado no es siempre el esperado y con frecuencia son las tiendas online las que se benefician.