Si para las empresas resulta cada vez más complicado llamar la atención de los consumidores a través de la televisión o de Internet, imagina lo difícil que resulta llamar la atención de los consumidores que van caminando por la calle. Las personas somos bombardeadas a diario con miles de mensajes publicitarios en la calle, tanto en las tiendas como en los edificios y los coches que vemos. Pero, con el ritmo de vida tan ajetreado que llevamos hoy en día, sobre todo en las grandes ciudades, es normal que terminemos por ignorarlos. Por esta razón, la publicidad se ha vuelto cada vez más creayova, original y arriesgada con el objetivo de llegar a los consumidores que pasan todos los días por los mismos lugares.
En la actualidad contamos con multitud de medios a nuestra disposición para hacer llegar nuestro mensaje publicitario a nuestro público objetivo: tablets, pantallas publicitarias, Smart TV, móviles, etc. Pero lo cierto es que la publicidad exterior continúa siendo una parte fundamental del marketing, pues representan el contacto «piel con piel» de la empresa con sus potenciales clientes. La recepción de este tipo de anuncios causan un impacto mucho mayor, especialmente cuando se trata de una pantalla grande que los consumidores no esperan encontrar. Pero además, ofrece a los consumidores la posibilidad de interactuar de una manera mucho más original que la que consiguen otras estrategias de marketing.
Las nuevas tendencias en publicidad exterior están intentando combinar dos ideas clave: causar un gran impacto y, al mismo tiempo, integrar sus anuncios dentro de los hábitos diarios de los consumidores. Lo que se busca es combinar la funcionalidad con la orginalidad, mostrándose de esta forma menos invasiva y aportando un valor añadido. Con lo cual, la publicidad exterior cuando se planifica bien supone todo un acierto y puede reportarnos muchos beneficios.
Podemos citar muchísimos ejemplos de todo lo que las nuevas tendencias en publicidad exterior están generando. Por ejemplo, JC Decaux crea anuncios interactivos realmente impactantes. Es el caso de la campaña que llevó a cabo hace unos meses en la que un vinilo se convirtió en un escaparate callejero que servía como «ventana» de lo que se ofrecía dentro del punto de venta. También SEAT creó recientemente, para el lanzamiento del su nuevo modelo Ibiza, una marquesina sincronizada convertida en una gran pantalla de 75 pulgadas con la que los usuarios podían interactuar.