Aunque el comercio electrónico sigue creciendo, lo cierto es que a los consumidores más jóvenes les sigue gustando acudir a la tienda física para buscar y comprar sus productos. Pero también les gusta encontrarse con nuevas tecnologías en el punto de venta que mejoren su experiencia de compra. Es la conclusión extraída de un estudio llevado a cabo recientemente por Barclays en Reino Unido y que alerta a las tiendas físicas de la importancia que tiene no subestimar el aspecto tecnológico en sus espacios. Y es que la mayor parte de los consumidores todavía sienten la necesidad de ver ciertos productos en persona antes de hacer la compra.
Las tecnologías en el punto de venta son la mejor forma de crear nuevas experiencias que añadan valor al proceso, ya sea a través de beacons, tablets, realidad virtual o similares. De esta forma, las tiendas físicas ganan cierta ventaja competitiva, cubriendo las necesidades de los consumidores en lo que respecta a la información o a la interacción. Por ejemplo, recibir información sobre las novedades u ofertas especiales puede ser realmente valioso para los comercios minoristas.
Gracias a Internet, los consumidores más jóvenes pueden comparar precios y productos con gran facilidad antes de acudir al punto de venta físico para hacer sus compras y esperan que los comercios sean cada vez mejores y más modernos a nivel tecnológico. El 45% de los encuestados admite que ha visto cerrar a muchas tiendas físicas de su barrio y piensa que las tecnologías digitales podrían ayudar a revivir estos locales cerrados. Más de la mitad cree que la incorporación de tablets y los espacios inteligentes aumentarían las posibilidades de que visitaran la tienda. Pero también, los pagos a través del móvil, la realidad aumentada y virtual les resultan interesantes.
En cuanto a la funcionalidad que las tecnologías podrían tener dentro del punto de venta, destacan la de encontrar productos sin tener que buscarlos por todas las estanterías, buscar ofertas especiales, o beneficiarse del asesoramiento y la orientación de los expertos.
No obstante, antes de invertir en este tipo de tecnologías, los negocios deben experimentar con ellas para saber si realmente serán positivas para mejorar la experiencia del cliente o si solamente se trata de una moda pasajera. En este sentido, el alquiler de tablets y pantallas publicitarias es una magnífica opción, ya que permiten al negocio hacer uso de este tipo de tecnologías sin tener que realizar una gran inversión y sin tener que hacerse cargo del mantenimiento de los mismos. Tras un periodo de tiempo prudencial, la tienda podrá ver si realmente están siendo efectivos y cómo han ido evolucionando las ventas.