La publicidad en las grandes superficies comerciales es una de las opciones favoritas de muchísimos anunciantes. Esto se debe principalmente a que los individuos que visitan este tipo de establecimientos comerciales, tienen la intención de adquirir determinado tipo de bienes o servicios.
Pues bien, si nos ponemos en el lugar del posible comprador que visita una superficie comercial con el propósito de adquirir un nuevo ordenador portátil, es muy probable que lo primero que decidamos hacer es comprobar las promociones actuales.
Tras haber hojeado el catálogo actual, además de haber visitado el lugar en el que las promociones semanales se exhiben, el siguiente paso será llamar a algún empleado que pueda ayudarnos con la decisión.
En la mayoría de los casos, el posible comprador no dispone de la información necesaria para poder efectuar una compra autónoma segura. Con segura me refiero al factor calidad, pues al realizar una compra de este tipo debemos minimizar el riesgo de adquirir un producto que nos deje decepcionados.
Dicho esto, podréis valorar el enorme poder que la publicidad en las grandes superficies tiene. Se trata de una publicidad que, además de ser deseada, ayuda a los individuos a asegurarse la realización de la compra adecuada.
Los anunciantes deben aprender a hablar el mismo lenguaje que sus actuales y potenciales consumidores, para ello, es imprescindible analizar sus hábitos de compra. Una vez realizado esto, podrán proceder a la planificación de la campaña publicitaria necesaria. En el caso en que el público objetivo visite a menudo las grandes superficies comerciales, se aconseja destinar una parte del presupuesto publicitario disponible a este tipo de publicidad.